Situada en lo alto del famoso Monte Pego, esta excepcional parcela de 1030 metros cuadrados ofrece un lienzo exquisito sobre el que construir la casa de sus sueños. Con una impresionante panorámica del mar, la posición elevada de la parcela ofrece una vista ininterrumpida que se extiende hasta el horizonte, donde las aguas azules se encuentran con el cielo infinito. Más allá de su espectacular vista al mar, esta parcela presenta una perspectiva igualmente cautivadora con vistas al pintoresco Pego Marjal - un humedal natural tranquilo y verde de belleza cautivadora. Esta doble vista, que combina a la perfección la tranquilidad de la marjal con la grandeza del mar, crea un entorno incomparable que promete una experiencia de vida única. Inmersa en la serenidad de este lugar, la parcela viene equipada con una conexión al elemento esencial del agua, una comodidad que simplifica el proceso de creación de su santuario a medida. Cada detalle ha sido meticulosamente considerado, asegurando que el lienzo está preparado y listo para la realización de sus aspiraciones arquitectónicas. Aproveche la oportunidad de crear su paraíso personal en este terreno de primera categoría, donde la fusión de la grandeza de la naturaleza y el ingenio arquitectónico armonizan para crear un espacio vital idílico. Tanto si su visión incluye una maravilla moderna con ventanales de suelo a techo para maximizar las vistas o un refugio tradicional que se funde a la perfección con el paisaje circundante, el potencial de esta parcela es tan ilimitado como su imaginación. Al situarse en este elevado mirador, contemplando las cautivadoras vistas que se extienden ante usted, la promesa de crear su refugio perfecto se convierte en una estimulante realidad. Con los cimientos ya puestos y los elementos esenciales en su lugar, el escenario está preparado para que usted construya no sólo una casa, sino un testamento de sus aspiraciones, pasiones y deseos - un lugar donde cada detalle refleje su esencia única. Bienvenido a la parcela de Monte Pego, donde lo extraordinario se funde con lo tangible, y las posibilidades son tan ilimitadas como las vistas que la abrazan.